Suazilandia es un Reino muy pobre que parece haber sido absorbido por la potencia industrial de Sudáfrica, cuyas grandes empresas, especialmente las agrícolas, están presentes por todo el país en forma de extensas plantaciones y varias industrias en la región de Manzini, como así también por las grandes cadenas de shoppings y supermercados. El cambio de la moneda local está fijado al del rand sudafricano, pero ni siquiera es necesario cambiar porque estos últimos son aceptados indistintamente.
A pesar de mi efímero paso por aquí, los pocos intercambios que he tenido con su gente fueron muy agradables y los suazilandeses han mantenido esa misma educación, respeto y alto nivel de inglés que he venido encontrando en todo el sur de Africa. Quizás, el que quedará como mi mayor recuerdo, es el de un maestro de escuela que frunció su ceño como con cierta sospecha cuando le pedí si podía acampar en la escuela para pasar la noche. Luego de dudar unos momentos me dijo que preferiría que no y que en cambio podía quedarme en su casa, porque en esta región abundan las mambas negras y no se sentiría tranquilo conmigo afuera.
Aún sabiendo sobre el enorme peligro de esta víbora, la más letal del mundo, le pregunté:
-¿Qué pasa si me muerde una mamba negra?
- Bueno, si te muerde por debajo de las rodillas, tenés cierta chance de llegar al hospital si es que está cerca – Hace una pausa y continúa - Si te muerde por encima, y suelen hacerlo fácilmente porque tienen la capacidad de extenderse hasta atacar a la cabeza, entonces no tienes más que minutos y no se puede hacer nada. - Finalmente concluye – Ahora, la excepción es si te muerde en un brazo. En ese caso, tu única chance de sobrevivir, es que tengas a alguien al lado que inmediatamente te lo corte para cortar el paso del veneno por la sangre.
-¿Y en qué parte de tu casa puedo dormir me decías?......
En un abrir y cerrar de ojos pasé por Suazilandia, en tan poco tiempo es imposible sacar conclusiones acertadas sobre una cultura, pero la impresión que me llevo es positiva y no tan diferente a la que me llevé del resto de los países del sur de Africa.
Comentarios
Publicar un comentario